La crisis municipal de San Fernando y la construcción de caminos de solución

Columnas y Artículos

Están en el aire sanfernandino los persistentes rumores sobre el monto que alcanzaría su déficit económico, las dudas manifestadas por distintos sectores respecto del uso de los recursos municipales, las dificultades que han existido para el pago de sueldos de funcionarios de importantes áreas como la educación municipal, los problemas y carencias en los centros de salud entre muchas cosas que se pueden mencionar.

Más allá de las citadas problemáticas -muy importantes, por cierto- hoy con la situación de pandemia, además de la creciente crisis social y económica que afecta al país y a nuestra ciudad es muy grave la falta de liderazgo mostrada por nuestras autoridades municipales, tenemos un alcalde sin voz.

Hoy parece mucho pedir, pero esperamos la acción y la presencia de nuestras autoridades locales conduciendo el combate de la pandemia, de manera decidida, sumando a todos los sectores de la ciudadanía, presente con iniciativas que ayuden de forma efectiva a combatir los efectos que está teniendo la crisis en nuestra ciudad y, sobre todo en los sectores de trabajadores que están sufriendo los efectos de la pérdida de empleos y la crisis económica en desarrollo.

Más allá de las ayudas que ha implementado el gobierno, que a nuestro juicio han ido llegando con retraso, son limitadas y han estado mal organizadas en su aplicación, la acción del municipio no ha ido mucho más allá de la repartición de algunas cajas con mercaderías que no alcanzan a solucionar la problemática de los sectores más afectados.

La población más vulnerable se ha visto en la necesidad de organizar ollas comunes en varios sectores de la ciudad, como una forma de enfrentar su necesidad más apremiante; la alimentación. Estas ollas comunes se han mantenido con el aporte solidario de alimentos, gas y otros recursos por parte de algunos voluntarios, recolectado por colectivos de apoyo hacia estas iniciativas y gestionados por los mismos vecinos integrados a las ollas comunes, hasta ahora sin apoyo ni del municipio ni del gobierno provincial, regional o nacional.

Esta manifestación de organización popular es muy loable y se da ante la necesidad de solucionar por medios propios los problemas que las personas padecen, pero es una manifestación evidente de que las autoridades no se hacen cargo de la situación de la población más afectada por la crisis.

Esperamos una acción diligente y coordinada de nuestras autoridades que detecte de manera efectiva las necesidades que la población tiene y concurra a entregar la ayuda que las personas efectivamente necesitan. Una señal positiva sería, por ejemplo, contactar a los dirigentes de las distintas ollas comunes, organizarlos, coordinarlos y preocuparse de abastecerlas con los distintos insumos requeridos, ya que, al ahondarse la crisis social, seguramente serán más difíciles de conseguir.

Paralelamente, y al calor de los esfuerzos que los actores sociales pueden hacer para ayudar a enfrentar las distintas crisis que estamos viviendo, es importante analizar y proyectar el San Fernando que queremos, es importante la articulación de fuerzas que puedan actuar en lo social pero también en lo político. Nuestra ciudad necesita un liderazgo, que pueda darle una conducción transparente, ordenada y que se haga cargo de sus múltiples necesidades y carencias, que tenga en cuenta las causas del reciente estallido social -algo opacadas hoy por la pandemia- pero que pueda proyectarse más allá de la actual crisis.-

Gabriel Rojas Oyarce
Contador Público y Auditor
Licenciado en Auditoria
Dirigente PC San Fernando.

Rancagua

22°

Soleado
San Fernando

23°

Soleado
San Vicente

19°

Soleado
Pichilemu

16°

Soleado
Santa Cruz

23°

Soleado