Recientemente, el Club Aéreo de San Fernando celebró su esperada Asamblea Ordinaria de socios y socias, oportunidad en la que se renovó la directiva.
A causa de los eventos sociales y de salud que afectaron la actividad nacional en su conjunto, esta asamblea no se había podido realizar y las autoridades del Club Aéreo debieron prolongar sus mandatos por largo periodo de tiempo. Gracias al esfuerzo de los directores, encabezados por el Presidente Iván Donoso Barros, la corporación nunca dejó de funcionar en las tareas que le son propias, tales como el aeródromo disponible para la ciudad en forma permanente, operativo por más de siete décadas, desde ahí salen todas las operaciones de CONAF en la ardua labor de la extinción de incendios forestales. La escuela de vuelo que cada año saca nuevos pilotos para servir al país desde el aire, no ha interrumpido nunca su labor.
En esta oportunidad se inicia un nuevo ciclo encabezado por el presidente del directorio que acaba de ser electo por un periodo de dos años, Miguel Ángel Ortega Quezada, aviador formado en este club aéreo, al que le ha dedicado largos años en la enseñanza de las bondades del vuelo. El nuevo presidente recibe una institución en las mejores condiciones de estabilidad económica, un buen material de vuelo en pleno servicio y un grupo de socios y socias que se sienten muy apegados a la institución en la que se están formando.
En entrevista con diario Sexta Región el nuevo presidente se refirió a las razones que lo motivaron a asumir este nuevo desafío en el club.
“Nuestro club aéreo es uno de los más antiguos del país, se ha destacado siempre por su compromiso con la comunidad, poniendo a disposición sus instalaciones y material de vuelo en caso de desastres tan frecuentes en nuestro país tarea no menos importante es la formación permanente de nuevos pilotos que asuman el deber de mantener activa sus "alas" en beneficio del país, acudiendo en ayuda al lugar que fuere si la situación lo amerita. Aportar y cumplir con la comunidad donde nos desarrollamos, haciendo lo que más amamos, es un gran privilegio. En consecuencia, ahora me corresponde darle continuidad a una gestión muy exitosa de nuestro "pastpresident" Iván Donoso Barros”.
El CASF es una de las instituciones privadas que aporta incondicionalmente a las necesidades públicas, como son el aeródromo, la batalla contra los incendios forestales, rescate aéreo transportado etc. etc. ¿cómo se logra financiar una corporación privada sin fines de lucro, que aporta con todos estos beneficios a la comunidad?
“Este es uno de los problemas más lacerantes en la administración de entidades sin fines de lucro, que hacen importantes aportes a la comunidad donde se desarrollan. El CASF no es una excepción. Este corporación no recibe aporte fiscal de ningún tipo y se debe financiar el mantenimiento de un aeródromo abierto a la comunidad 24/7. Tanto el Estado como el sector privado, son muy bienvenidos en nuestro aeródromo, el que se financia con recursos que pagan los socios en sus cuotas sociales y algunos arriendos de terrenos de propiedad del CASF, para actividades aéreas distintas al que hacer del club aéreo. Sería muy importante para el mejor servicio de esta actividad muy necesaria, que tanto la Municipalidad como el Gobierno Regional, puedan participar activamente en la búsqueda de recursos para mejoras tan urgentes como la reparación de la pista y el mejoramiento de la seguridad del aeródromo.
El crecimiento de nuestra región ha sido muy importante los últimos años y la aviación civil debe estar al frente de este crecimiento. ¿Qué proyectos tiene el CASF para los próximos años, que usted encabezará al frente de esta corporación?
“Hay dos áreas en las que debemos seguir haciendo esfuerzos por atender en forma prioritaria; La primera tiene que ver con nuestra pista de aterrizaje, ya que el constante uso de aviones de tamaño mayor, como son aquellos que combaten incendios forestales durante la temporada de verano, dañan notablemente la pista. Para la próxima temporada que se inicia en el mes de Noviembre, esta pista debe estar reparada, o simplemente no se podrá operar desde San Fernando, estación esencial para este tipo de operación. Nuestra segunda prioridad, consiste en el mejoramiento de nuestra Escuela de Vuelo, hay muchos jóvenes que quieren emprender en las artes de volar, para lo que necesitamos de mas material de vuelo y mejores herramientas para dar la mejor instrucción posible. Si durante mi administración al frente del CASF, logramos llegar a estas metas, habré concluido mi carrera como aviador civil de la mejor forma posible”.
