Más de un centenar de estudiantes de distintas edades y colegios de Coya, se reunieron en el Colegio Bellavista para el cierre del Programa Educación Ambiental del Agua Coya 2019-2022. Se trata de un plan educativo impulsado por División El Teniente, que busca acercar y concientizar sobre la problemática de escasez hídrica en la región a los niños y niñas, a través de distintas actividades educativas y recreativas.
La serie de talleres y actividades comunitarias que financia la División, fueron coordinados por la Junta de Vigilancia Río Cachapoal Primera Sección en distintos colegios de la comuna. “Los profesores les podemos enseñar la teoría, pero es completamente distinto cuando aplican los temas. Ahora, la idea es seguir trabajando los mismos contenidos vistos, como insumo de perfeccionamiento para el colegio”, aseguró la jefa de UTP del Colegio Bellavista, Carolina Mollo.
La idea de esta iniciativa era adaptar los contenidos previstos por el Ministerio de Educación a actividades lúdicas para los y las estudiantes, para acercar la problemática de la sequía. “Estamos muy contentos, creemos que fue un muy buen ciclo con buenos productos. Los profesores nos manifestaron que fue de mucha ayuda. Nosotros estamos convencidos que, si los niños entienden la importancia del agua desde pequeños, después será mucho más sencillo”, afirmó Robert Hilliard, gerente de la Junta de Vigilancia de Río Cachapoal Primera Sección.
En el primer tramo, se trabajaron actividades experimentales enfocadas al área de las ciencias naturales. Posteriormente, se involucraron otras asignaturas como arte, tecnología, música y lenguaje. “Realmente me gustaron mucho las actividades. Aprendí que tengo que cuidar el agua porque nos sirve para las plantas y sin ellas no podemos vivir. Hay algunos compañeros que han demostrado un cambio gracias a esto”, celebró Martina Gómez, alumna de séptimo básico.
Esta ceremonia permitió dar cierre al proceso de enseñanza, que terminó con la entrega de un libro creado por los estudiantes, que resume los aprendizajes en materia de cuidado del agua. El consultor de Desarrollo Comunitario de El Teniente, Roberto Mallea, hizo un positivo balance. “Hemos logrado incentivar la participación y la conciencia en el cuidado del agua. La importancia es poder propiciar y acercar la comunidad en estas temáticas. Como División, somos un actor presente y queremos compartir el cuidado del medioambiente con ellos”.
En una primera instancia, los talleres se realizaron en el Colegio San Lorenzo, Bellavista y Chacayes de Coya. Gracias al éxito de este programa, la División junto a la Junta de Vigilancia asumieron el desafío de trasladar este programa a establecimientos educacionales de la Población Dintrans de Rancagua.
Testimonios:
- María Alejandra Caldera, Profesora de Artes y Música en Colegio Bellavista de Coya.
“Yo siento que este es un ejemplo de cómo las grandes empresas pueden aportar con un granito de arena en nuestras escuelas (que son las más vulnerables)”.
- Karina Cortés, Profesora de Lenguaje.
“Llevar este tema a lo práctico, en algo tan cotidiano como el dibujo, para ellos es muy divertido. Ojalá esto fuera siempre así para crear conciencia y tomarle peso al cuidado del agua”.
- Rodrigo Arredondo, director del Colegio Bellavista.
“Con esto, creamos conciencia en las generaciones futuras de la escasez del agua. Esto viene a darle un abanico más amplio de actividades pedagógicas con los niños, donde la parte artística y lúdica es importante para el desarrollo integral de los chicos”.
- Vanessa Mancisidor, coordinadora del Programa Educación Ambiental de la Junta de Vigilancia.
“Esto es importante porque son los niños, donde se logra cimentar la responsabilidad y conciencia del cuidado, sobre todo cuando tenemos tantos desafíos”.
