El experto Rodrigo Pulgar, académico de Medicina Veterinaria de UST Santiago, explicó cómo se debe actuar ante un golpe extremo de calor en nuestras mascotas, ya que una mala acción podría ponerle fin a su vida.
En los últimos años, la popularidad de los perros y gatos con cabeza corta y cara achatada, como los bulldog inglés, bulldog francés, pug, bóxer y pekinés, en el caso de los canes, y el persa en el de los felinos, ha crecido más y más.
Pese a que son considerados muy buenos acompañantes, sus dueños deben saber que al ser razas braquicéfalas necesitan ciertos cuidados especiales, sobre todo en esta época, cuando la temperatura está llegando a los 40°, ya que son más propensos a sufrir un golpe de calor que puede complicar sus vidas.
Sobre esto profundizó el académico de Medicina Veterinaria de UST Santiago, Rodrigo Pulgar, quien explicó que las características propias de estas razas pueden provocar que soporten menos el calor, ya que presentan más dificultades para respirar, incluso en su día a día.
“Los perros sólo transpiran por sus almohadillas plantares, no en el resto del cuerpo, por lo que la forma que tienen de eliminar el calor es con el jadeo. Por lo tanto, en los perros de estas razas el problema es mayor por la dificultad respiratoria que tienen asociada”, comentó.
¿Cómo evitar que las mascotas sufran un golpe de calor?
Según explicó el profesional, lo primordial es evitar los paseos a las horas peak de calor y sacarlos a caminar durante la noche. “Además, se deben considerar lugares con sombra para no exponer permanentemente a la mascota al sol. Durante los paseos hay que considerar periodos de descanso a la sombra”, recalcó.
“Es importante tener en cuenta que si la mascota rehúsa a moverse, no hay que obligarla, pues puede estar sufriendo un episodio de hipertemia (aumento de temperatura corporal) que la puede llevar a un ‘shock térmico’ potencialmente normal”, dijo, enfatizando que “un accesorio imprescindible para los paseos, además de su arnés, traílla y bolsa para fecas, es una botella de agua, la que servirá para hidratarlo y también para mojarle la cabeza y el tronco, lo que ayudará a que su temperatura corporal baje”.
“Las mascotas tienen una temperatura de aproximadamente dos grados superiores a la nuestra. Por lo tanto, si el tutor siente calor, la mascota también. El uso de ventiladores o aire acondicionado está recomendado en momentos de mucho calor, siendo el mejor indicador la sensación térmica del tutor, es decir, si el humano tiene calor, la mascota probablemente tenga un poco más”, detalló.
Para evitar los golpes de calor, “están disponibles en el mercado mantas o colchonetas refrigerantes rellenas con un gel, el cual provoca una reacción endotérmica al compactarse. Entonces, cuando el perro se acuesta, su peso hace que las moléculas del gel que contiene se rompan, absorbiendo su calor corporal y disipándolo”.
¿Qué se debe hacer ante un golpe de calor?
Si ves que tu mascota está sufriendo por un golpe de calor, que notaremos debido al jadeo continuo del perro o si es que no quiere moverse, sí o sí deben intervenir inmediatamente, ya que puede estar sufriendo de hipertemia. En caso de notar esto, “rápidamente hay que mojar al animal en la zona del tronco y la ingle, prender el aire acondicionado si es que hay uno disponible y aplicar gel pack fríos en todo el cuerpo, sobre todo en la zona abdominal e inguinal. De ser posible, hay que chequear la temperatura rectal”, dijo Pulgar, señalando que estos golpes de calor pueden afectar en mayor medida a cachorros y animales geriátricos.
La dieta y la hidratación en momentos de calor
Rodrigo Pulgar explicó que en períodos de calor no es necesario cambiar la dieta de nuestras mascotas, sin embargo, lo ideal es darle su alimento en las horas de menos calor porque esto genera una subida de temperatura en sus cuerpos. También se recomienda darle alimentos húmedos, ya que estos tienen un alto contenido de agua.
El veterinario también hace énfasis en colocar hielo en el agua de nuestros perros y que, si se mueve por todo el hogar, haya varios bebederos por toda la casa para que así el animal tenga alternativas para hidratarse, sobre todo si le cuesta desplazarse.
¿En qué momento acudir al veterinario?
“Si el animal ha estado expuesto al calor y presenta jadeo excesivo, diarrea, vómitos, lengua pegajosa (u obscura), estupor, tambaleo con temperatura corporal superior a 42º C, es muy probable que esté sufriendo un shock térmico. De ser así, debe acudir inmediatamente a una clínica veterinaria y no llamar un veterinario a domicilio. En el traslado, recuerde encender el aire acondicionado de su automóvil”, enfatizó.
“El problema es que el shock térmico es potencialmente fatal siendo difícil de revertir, la sobrevida del animal dependerá de cuánto tiempo estuvo expuesto al calor. Por lo tanto, lo mejor es prevenirlo con todas las medidas expuestas”, concluyó el docente de UST.
