Cientos de personas participaron de esta fiesta de la fe en Rancagua, San Fernando y las distintas parroquias de la Diócesis de Rancagua.
Bajo el lema “María, madre de Chile, únenos” cientos de fieles participaron en la Oración por Chile en la ciudad de Rancagua el domingo 25 de septiembre, dando cuenta de su devoción a la Virgen del Carmen, patrona de nuestro país.
La actividad fue organizada por el Consejo Laical del Decanato Santa Cruz y tuvo acogida en los fieles de las distintas comunidades parroquiales del decanato y sus sacerdotes.
Ellos se dieron cita a las 16 horas en el frontis de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, ubicada en la Alameda. En el lugar junto con motivar a los presentes se bailó un pie de cueca en honor a la Virgen. El envío fue realizado por el Vicario General de la Diócesis, padre José Vergara y luego comenzó la procesión con la imagen de nuestra Madre, cuyo carro fue llevado por miembros de Ejército y fieles, en las distintas etapas del trayecto.
El recorrido comprendió las calles Alameda, Alcázar, Cuevas y Estado, para culminar en el frontis de la Catedral, y durante él los fieles oraron y cantaron a la Virgen Reina de Chile. En la plaza de Los Héroes la imagen de Nuestra Señora del Carmen fue escoltada hasta un escenario para luego realizar una liturgia de oración.
Al igual que en Rancagua, en todas las parroquias de la diócesis se realizó la Oración por Chile.
San Fernando
En San Fernando, las cuatro parroquias de la ciudad se unieron para celebrar el Día de la Oración por Chile, realizando una procesión por las calles del centro y luego una eucaristía.
Ésta comenzó desde la Parroquia Nuestra Señora del Carmen, dónde el Párroco Fray Danilo, bendijo a los presentes y dio inicio a la peregrinación, en tanto que niños que preparan su Primera Comunión bailaron un pie de cueca en honor a la Virgen Santa. Luego, durante el trayecto -para testimoniar su fe y participación-, los jóvenes que se preparan para su Confirmación oraron y llevaron una bandera Chile.
Los peregrinos se detuvieron en las distintas estaciones dispuestas, en tanto que se oraba y se vitoreaba a la Madre y Reina de Chile. Una de estas paradas fue en la Parroquia San Agustín, dónde también se le ofreció un baile para, posteriormente, seguir hasta la Parroquia San Fernando Rey, donde fue recibida entusiastamente por los fieles, que participaron en una misa.
La Eucaristía fue presidida por el Obispo Emérito de Rancagua, Monseñor Alejandro Goic, acompañado de sacerdotes y diáconos. Así, luego de orar, agradecer y pedir la intercesión de Nuestra Señora del Carmen, se terminó la celebración en San Fernando con un esquinazo.
