La ruleta es todo un icono de los salones de juegos y uno de los entretenimientos que mejor han sabido sobrevivir al paso del tiempo. Originaria de Francia en el siglo XVIII, rápidamente cautivó a la sociedad francesa para luego salir de sus fronteras e ir evolucionando hasta convertirse en lo que es hoy en día: uno de los pasatiempos más extendidos y reconocibles del mundo. Sin la capacidad de adaptarse a los cambios, sería muy difícil haber llegado a tantos rincones como lo ha hecho.
En los tiempos actuales, la ruleta online contempla muchas variaciones en su catálogo, como las modalidades más conocidas trasladadas a las pantallas, como la francesa y la americana, o la posibilidad de celebrar una partida en tiempo real. De este modo, los usuarios no solo tienen más opciones de elegir su tipología favorita, sino que también cuentan en el campo virtual con más posibilidades de realizar pronósticos o de interactuar con lo que está sucediendo en ese mismo instante de la partida.
Primeros pasos del juego
La forma y el origen sobre cómo se originó la pequeña rueda es incierto, pero sí que está documentado que a finales del siglo XVIII en París ya existía el mecanismo circular con los colores negro y rojo para todos los números, a excepción del cero, que era verde. La conocida como variante francesa fue expandiéndose por todo el viejo continente gracias, en parte, a la influencia de los locales especializados de la ciudad de Montecarlo, donde solía acudir la clase más acomodada de la sociedad.
Debido a su expansión, no tardaron en aparecer métodos de juego para minimizar las pérdidas y maximizar las ganancias. La gran mayoría de estas teorías procedían del ámbito matemático y todavía hay jugadores que las aplican hoy en día, como el sistema de la Martingala, la Fibonacci o la D’Alembert. Todos ellos se basan en secuencias numéricas y han sido analizados durante centenares de años de historia. Aunque en pleno siglo XXI hay nuevas estrategias, con la ayuda de los análisis de datos o los algoritmos, siguen siendo las más usadas.
La aparición de la ruleta americana
La modalidad americana se desarrolló hace dos siglos en Estados Unidos y ahora es la más extendida en el campo virtual por ser la más fácil de entender entre los nuevos aficionados. Con el objetivo de ampliar ganancias, las diferentes casas añadieron un cero más, el doble cero, pasando de las 37 casillas de la versión gala a las 38. A su vez, cambiaron ligeramente algunas de las reglas, como aquellas que contemplaban la opción de recuperar una parte o la totalidad de la apuesta inicial realizada.
La revolución del salto digital
Uno de los puntos culminantes de la historia de la ruleta fue la primera versión digital, a finales de la década de los 90, cuando las computadoras con conexión a internet empezaban a normalizarse en los hogares. En menos de una década, ya había muchas plataformas especializadas que ofrecían este y otros juegos a sus usuarios, permitiendo la celebración de una partida sin tener que desplazarse a ningún lugar. Luego, esto dio el salto a los teléfonos inteligentes y otros dispositivos que han permitido conectarse a la red.
Entre los cambios significativos que se pueden destacar, están las múltiples opciones de apuesta, haciendo previsiones sobre aspectos que el pasatiempo físico y tradicional no permitía. También podemos citar la variedad en cuanto a contenidos, dando mucho peso a las conexiones en tiempo real con un crupier dirigiendo la sesión al otro lado de la pantalla o presentando diferentes animaciones temáticas. Ejemplo de ello son estilos como el brasileño o modalidades como la ruleta rápida, desmarcándose de la americana y la francesa.