Tras recopilar antecedentes que indicaban la existencia de cultivos de cannabis en quebradas de las comunas del Paredones y Pichilemu, detectives de la Brigada de Investigación Criminal del balneario regional, se trasladaron a los lugares identificados para verificar los datos obtenidos.
Al llegar a los predios, el personal de la PDI constató la presencia de dos jardines con plantas de cannabis, los cuales contaban con sistemas de regadío artesanales, que obtenían agua desde vertientes cercanas.
Según señaló la policía civil, fueron encontradas alrededor 650 plantas de cannabis, cuyo potencial de producción alcanza un avalúo de 325 millones de pesos.
El resultado de los hallazgos fue informado al fiscal de turno, quien, debido a la complejidad del acceso a los predios, instruyó remitir muestras de la droga al Servicio de Salud O’Higgins y la destrucción de las plantas en el lugar.
En cuanto a los responsables de la existencia de los cultivos, la PDI informó que se mantiene trabajando para identificarlos.