La batalla que se dio para recuperar Topocalma es una causa digna de admirar. Durante el año 2017 vimos como el Concejal Gabriel Palma, junto a dirigentes sociales, rostros reconocidos y dirigentes de trabajadores del mar se unieron para crear el movimiento Playas Libres Litueche, el cual tuvo por objeto en aquel momento solicitar firmas que luego respaldaron la solicitud de reapertura del acceso histórico a la Playa de Topocalma, la cual había sido cerrada el año 2013. El desenlace de dicha causa ya es conocido, pero lo importante es señalar que en base al respeto, la unión y el compromiso dicho movimiento logró que el Intendente y la SEREMI de Bienes Nacionales (ambos de O'Higgins) ordenaran la reapertura de la Playa de Topocalma en el mes de Diciembre.
Tras dicha apertura, las familias de Litueche y del resto del país han disfrutado nuevamente de uno de los lugares más hermosos de Chile. Niños y adultos mayores se han emocionado al volver a Topocalma, y los trabajadores del mar han podido acceder sin restricciones al borde costero.
Sin embargo, tanta buena noticia no podía ser gratis, ya que la reapertura de Topocalma además de devolverle a Litueche la posibilidad de un desarrollo laboral y turístico, también genera diversas obligaciones, entre las cuales destacan la mantención del acceso, la protección del ecosistema y el cuidado del borde costero. Deberes que según se acusa han sido asumidos por los mismos vecinos en desmedro de la indiferencia de la autoridad.
Para saber más de esto nos contactamos con Gabriel Palma, concejal de Litueche y quien ha desarrollado y coordinado diversas acciones en torno al cuidado de Topocalma, quien nos indicó;
Ha sido una época difícil. Nos cuesta entender el poco interés que ha mostrado la autoridad de Litueche por desarrollar y proteger Topocalma. Es que podemos comprender que no se hayan querido sumar a la causa por reabrir el acceso, pero no puedo aceptar que a la fecha aún no hayan desarrollado acciones concretas para regular las diversas acciones que se están desarrollando en la playa. Pensé que tras la apertura, inmediatamente se iban a preocupar de limpiar los accesos, retirar la basura o regular la correcta instalación de baños y estacionamientos, pero al parecer fui muy optimista. Ojalá que atinen, y si están trabajando en eso, ojalá que se apuren.
Mientras tanto, nosotros -vale decir, algunos vecinos, pescadores y turistas- nos hemos unido para asumir algunos de esos deberes, y gracias al esfuerzo y el aporte de particulares a la fecha hemos desarrollado dos jornadas de "orden y limpieza" del acceso y de la playa de Topocalma. Pusimos letreros que instan a no botar basura, a no prender fuego y a no pisar el cochayuyo, limpiamos los costados de varios kilómetros del acceso que hemos recuperado, hemos recogido basura, etc. El compromiso y la voluntad de la gente ha sido clave y me emociona, por ende, lo único que puedo sentir es gratitud por todos los que siguen confiando y que han cooperado de una u otra manera.
Este sábado 20 de enero a partir de las 10 de la mañana desarrollaremos la Tercera Jornada de Orden y Limpieza del acceso y de la Playa de Topocalma, a la cual invitamos a participar a todo aquel que se quiera sumar. Es que aún hay mucho por hacer, y mientras haya motivos nosotros no tendremos excusas. Ojalá que las autoridades valoren lo hecho y escuchen nuestras peticiones, hay puentes que arreglar, accesos que mantener y es necesario que juntos elaboremos políticas públicas que apunten al turismo responsable y ecológico./