Llevar un registro de los ingresos, reunir los comprobantes de gastos y tener claras las deducciones permitidas son algunas de las recomendaciones para que las pymes puedan realizar el proceso correctamente. Para el año comercial 2022, que corresponde pagar en la operación de este año, la tasa de impuesto de primera categoría se estableció en 10%.
La Operación Renta comienza en marzo de cada año, con un plazo de presentación de Declaración de Renta que termina el 30 de abril. Este proceso que deben realizar los contribuyentes -tanto personas como empresas- se hace de manera manual y electrónica en el sitio web del Servicio de Impuestos Internos (SII).
En este proceso anual las empresas deben declarar y pagar sus impuestos correspondientes al año comercial anterior, de manera que puedan cumplir con sus obligaciones fiscales. Según la información entregada por empresas, instituciones y agentes retenedores, el SII proporciona una propuesta online en la declaración de impuestos a la mayoría de las empresas y se genera automáticamente el formulario 22, resumen de los ingresos del año anterior.
Diego Plaza, analista financiero tributario de Maxxa, fintech de servicios financieros para pymes, afirma que “entre los años comerciales 2020 y 2022, las pymes fueron beneficiarias de una reducción en la tasa de impuestos de primera categoría, establecida en un 10%. Este beneficio debería terminar este año comercial 2023, por lo tanto, en 2024 podría volver al 25%. Sin embargo, hay diferentes proyectos de ley que buscan que el regreso al tributo original sea de manera gradual”.
Plaza agrega que “estar preparado para la Operación Renta es fundamental. Las empresas deben informarse acerca de las obligaciones fiscales y de los cambios de la legislación tributaria. Hay que tener claros ciertos puntos antes de entrar en el proceso para evitar errores y sanciones”. Para esto, el analista de Maxxa entrega recomendaciones para llevar este proceso de manera exitosa:
1) Es importante mantener un registro detallado de los ingresos, el que debe incluir capital, ventas, intereses, entre otros. De esta manera podrás conocer con precisión cuánto debes declarar en la Operación Renta.
2) Reunir todos los comprobantes de los gastos es esencial para deducirlos de tus ingresos. Contar con los comprobantes correspondientes, como recibos o facturas, te ayudará para iniciar el proceso de declaración.
3) Otro punto relevante es tener claras las deducciones permitidas. Para reducir la cantidad de impuestos a pagar, se pueden deducir ciertos gastos de tus ingresos. Conocer estas deducciones permitidas te podrían ser de gran utilidad.
4) Existen herramientas electrónicas que te pueden ayudar a llevar el registro de ingresos y gastos, para generar la declaración correspondiente a la Operación Renta de manera automática, simple y ágil. Por lo tanto, si se puede acceder a ellas, el proceso se hará mucho más fácil.
5) Por último, no está de más revisar y corregir la información antes de enviarla, ya que un pequeño error en la declaración podría tener consecuencias como multas o sanciones y contar con el apoyo de un contador, podría ser una buena posibilidad.
“Es necesario recordar que el no presentar la declaración de impuestos puede dificultar la obtención de créditos, así como también impedir o complicar los procesos de solicitud de financiamiento estatal. En esta situación, la empresa incurre en una infracción tributaria, viéndose afectada su reputación y credibilidad, además, de no poder acceder a determinados beneficios tributarios. Por lo tanto, es muy relevante estar atento a la información que entrega el SII para realizar la declaración a tiempo”, concluye el analista financiero tributario de Maxxa.