-Gracias a un plan que reutiliza zonas de extracción cerradas por el peligro que representa el agua-barro para los trabajadores y el riesgo de bombeo.
-Desde agosto de 2021 a la fecha, se han extraído 900 mil toneladas de esta mezcla de agua con material fino con palas semi autónomas comandadas a distancia.
”Un desafío con múltiples aristas”, así describen en la mina Diablo Regimiento de El Teniente el proyecto que les ha permitido recuperar zonas, donde se había detectado agua-barro y que se habían cerrado, por el riesgo que esta condición representa para los trabajadores ante escenarios de bombeo.
Fue a principios de 2021 cuando comenzaron los estudios de prefactibilidad para encontrar una alternativa que permitiera la extracción del mineral que había quedado cautivo, actividad que inició en agosto del año pasado.
El proceso, eso sí, no estuvo exento de dificultades e involucró a una serie de actores de distintas gerencias, junto con operadores y mantenedores de distintas áreas. “La invitación en ese contexto fue a ir más allá, a buscar las herramientas necesarias para recuperar ese mineral sin exponer trabajadores y darle continuidad a la extracción”, señala Francisco Castro, jefe de Unidad en Diablo Regimiento.
Para esta operación, la automatización fue clave. “Estamos operando con tres máquinas LHD (palas cargadoras) semi autónomas que se controlan a distancia desde la mina y las instalaciones de Rancagua, así no exponemos a las personas”, detalla Karl Hedberg, operador de la mina.
A la fecha, se han extraído 900 mil toneladas de agua-barro del polígono de extracción, que se expande cada vez más. “Esas toneladas no estaban consideradas en el plan de producción cuando iniciamos este proceso, porque era un área abandonada, por lo tanto estamos aumentando la vida útil de nuestros sectores productivos. Apostamos a que antes de fin de año podemos llegar al millón de toneladas de barro extraídas en este nivel”, postula Castro.
Para el gerente de Minas de la División, Rodrigo Andrades “Esta nueva forma de trabajar que se está implementando nos permite transformar recursos mineros en reservas de manera segura, sin exposición a las personas. Es importante que esta práctica se haga transversal a todos los sectores de la gerencia de Minas, para lograr recuperar más de 100 millones de toneladas de mineral que hoy se encuentran cautivas en zonas de agua-barro”.
Joaquín Bernier, Superintendente Mina Sur
“Este trabajo es un gran aporte de valor para nuestra División que va en línea con nuestro propósito. Principalmente, porque permite mejores condiciones de trabajo y mayor calidad de vida de nuestros trabajadores y también porque logramos extender la vida útil de nuestros sectores productivos, generando un mejor negocio. Las 900 mil toneladas extraídas han significado un aporte de aproximadamente 27 MUS$ en excedentes”.
Fabián Cárdenas, jefe de Proceso Extracción
"El valor de este proyecto reside no sólo en el aporte extra de mineral hoy, sino que también en la transformación cultural, la implementación de tecnologías y el desarrollo de personas, elementos que pasan a ser activos de la división y permiten que los nuevos proyectos y operaciones sean más eficientes y seguros".